El Málaga CF avanza lentamente en sus intentos de asegurar el futuro de dos jugadores clave, Antoñito Cordero y Kevin Medina.
Antoñito, cuyo contrato actual expira en junio, ha estado en conversaciones con el club después de meses de comunicación estancada. Las últimas negociaciones han sido más fluidas, pero una resolución está lejos de ser segura.
El club está interesado en extender el contrato de Antoñito por cuatro años, aunque sus representantes, encabezados por el agente Pini Zahavi, se inclinan por un acuerdo más corto, de tres años.
Otro punto de fricción es la cláusula de rescisión del jugador. El entorno de Antoñito propuso inicialmente una cifra de dos millones de euros, pero el Málaga está presionando para obtener una cantidad mayor para asegurarse de que estén bien compensados en caso de que se venda al extremo.
Los términos financieros también son motivo de discordia. Fuentes cercanas al jugador dicen que espera ser el miembro mejor pagado de la plantilla. Los directivos del club han expresado su voluntad de cumplir con esta demanda, pero aún no se ha concretado un acuerdo.
Las negociaciones se estancan
Mientras tanto, la situación de Kevin Medina es aún más precaria. Las negociaciones para extender su contrato, que también termina en junio, se han estancado por completo después de un cambio en su representación a principios de este año. Si bien se informó que se había llegado a un acuerdo preliminar, los nuevos agentes han adoptado un enfoque diferente, lo que ha obligado a las negociaciones a volver al punto de partida.
Kevin, que ahora es libre de negociar con otros clubes, ha reiterado su deseo de quedarse en Málaga, al que llama su “casa”. El club comparte este sentimiento, pero con el creciente interés de otros equipos, particularmente en la misma división, el tiempo se está agotando.
Pero, por ahora, el director deportivo del club, Loren Juarros, está haciendo malabarismos con múltiples prioridades de cara a la ventana de enero.
Posibles salidas
En la actualidad, el Málaga está evaluando su plantilla. La principal prioridad es un nuevo delantero, pero cualquier incorporación requeriría crear espacio en la plantilla de 25 hombres.
Sergio Castel, que ha tenido una participación limitada, parece el más probable que salga de la línea de ataque.
Los jóvenes defensores Moussa y Murillo también podrían salir cedidos para ganar minutos de juego. El centrocampista Haitam, que está a punto de regresar de una lesión, también podría beneficiarse de una transferencia temporal para recuperar la forma física.
Fuentes del club sugieren que, si bien no se esperan salidas inmediatas, la actividad podría aumentar a medida que se acerca el cierre de la ventana.
